Ayer unidos por el alpinismo, hoy separados por la Fundación Nacional Francisco Franco.

 

Regresábamos de ascender al Aneto (5 horas de travesía de glaciar, cuando ahora solo se tardan 2) cuando pasada la Brecha de Rolando, bajando hacia el valle del río Ara por Bujaruelo, paramos un momento para admirar desde lejos nuestro próximo objetivo: el Vignemale, de 3.299 m.

Floren y Miguel, hace 48 años. Pirineos, julio 1975. Al fondo el macizo de Vignemale (Fr.)

Ese momento de ilusión y también de cansancio queda reflejada en esta fotografía. Dos buenos amigos destinados en la Base de Los Alcázares, él como Teniente recién salido de la Academia, y yo como Cabo 1º a punto de salir destinado para la Escuela Militar de Paracaidistas de Alcantarilla, cuya amistad se fue forjando en poco tiempo, en el curso de travesías y ascensiones en Pirineos y en los Picos de Europa, compartiendo aventuras y experiencias imposibles de olvidar.

Cada uno siguió su ruta profesional, con algún esporádico y fugaz encuentro, que sirvió para afianzar aún más aquel sincero afecto que nos profesábamos.

Durante varios años, por Navidad le escribía una postal a su domicilio de Alcalá de Henares, pues él estuvo muchos años destinado en la Base de Torrejón de Ardoz, hasta que al cabo de algunos, dejó de contestarme y de responder a mis llamadas telefónicas.

Pasó mucho tiempo hasta que en 2017, con motivo de mi visita al Archivo Histórico del Ejército del Aire en Villaviciosa de Odón, me encontré con su fotografía en un despacho, en donde se le acreditaba como Coronel-director del Archivo, algo que me sorprendió llenándome de satisfacción.

A mi petición de pasar a saludarlo, el jefe de sala me dijo que no se encontraba en el archivo y entonces yo le dejé una nota en sobre cerrado, la que cabe pensar puede cruzarse entre dos viejos camaradas, con el encargo de que se la hiciese llegar.

Pasaron muchos días, semanas y meses, y nunca tuve ninguna noticia de Miguel.

La siguiente vez que volví a saber de él fue cuando en agosto del año siguiente, vi su nombre en la larga lista de jefes y oficiales de los tres ejércitos, que declaraban su adhesión a la memoria histórica del general Franco.

Miguel Orgillés Trol, era uno más entre los miembros del generalato, que de manera pública se adhirieron a aquel manifiesto promovido por la Fundación Nacional Francisco Franco.

Todavía hoy intento recuperarme de mi incredulidad.

Floren Dimas
Oficial del Ejército del Aire (R)