La tropa. ¿Por qué estamos como estamos?

La ley, qué importante es y qué importante es su cumplimiento. Pero hoy en nuestro estado parece que solo hay leyes para algunos, otros parecen estar por encima del bien y del mal. El ejército no es una excepción a esto, se aplica la ley del embudo, a unos nos aplican la parte estrecha y a otros la ancha.

La tropa en el ejército tiene una problemática específica, que se viene arrastrando desde que los ejércitos se nutrían con personal de reemplazo. Cuando se pasó de un ejército de reemplazo a un ejército profesional, se tendría que haber cambiado el modelo, pero no se hizo, solo se han dedicado parchear cuando los problemas se desbordan. Cuando había militares de reemplazo, la tropa profesional (denominado entonces voluntariado especial) estaba pensada como un paso para llegar a suboficial. Entonces podías ser tropa por un periodo de como máximo diez años, si en ese tiempo no habías logrado acceder a la escala de suboficiales, te ibas a la calle. El sistema funcionaba aceptablemente bien hasta que se inició la transición a un ejército profesional. Entonces empezaron los problemas, de una situación en la que casi todos pasaban a la escala de suboficiales, se pasó en pocos años a que menos de la mitad llegaban a ascender. En pocos años se redujo drásticamente el número de efectivos de tropa de reemplazo, a causa de los excedentes de cupo, de la prestación social sustitutoria, del acortamiento del tiempo del servicio militar…. Eso trajo consigo la disminución en la oferta de plazas para la academia de suboficiales, pero no la de entrada de voluntarios especiales, que aumentó. Por lo tanto se pasó de que un militar de tropa accedía a la academia de suboficiales casi seguro y además en plazo temporal de cuatro o cinco años, a que se fuera generando un tapón que dio lugar a que solo entraran los mejores y a los diez años de servicio (fecha límite entonces de pertenencia a las fuerzas armadas). Por lo tanto se llegó a que solo tenías una oportunidad de ser suboficial, justo en último año, con la espada de Damocles del despido sobre la cabeza. Si no se conseguía, te ibas a la calle con una mano delante y otra detrás, porque en ese tiempo no había ni siquiera derecho a paro para los militares de tropa.

A los generales, las personas y sus problemas les importan poco y si esas personas son personal de tropa, menos aún. Por eso, pese a que el problema se veía venir y aumentaba año a año, nadie hizo nada por solucionarlo hasta que los expulsados fueron más de mil en un año. Entonces el problema empezó a tener repercusión mediática y a raíz de eso pusieron el primer parche, desde entonces (los años 80), la tropa vamos de parche en parche legislativo y entre parche y parche un montón de compañeros que se quedan por el camino. Para que os hagáis una idea, en 19 años de servicio, a mí me han afectado cuatro leyes de tropa diferentes, cada una de ellas cambiaba sustancialmente nuestras condiciones. El último parche que pusieron es la ley 08/2006 “Ley de tropa y marinería”, esta ley nos la vendieron como la panacea, la ley que solucionaba todos nuestros problemas. Pero lo único que ha logrado es parchear por enésima vez nuestra situación y que se tardase más en llegar al punto de ruptura. Punto de ruptura que llegará en un año, dos a lo sumo. Hoy como en los 80, el sufrimiento que está generando esta situación es conocida por los generales, pero hoy igual que pasó en los años 80 nadie va a hacer nada por solucionarla hasta que el problema les estalle en las manos.

Pasemos a lo que nos ocurre hoy a la tropa. La ley 8/2006 sustituyó en lo referente a la tropa y a los militares de complemento a la ley 17/1999. La ley 17/1999 fue la que creó la tropa permanente, pero fue también la que establecía un límite de edad fijado en los 36 años para los no permanentes. Ahí fijaron que querían que solo un 10% del personal de tropa fuera permanente, porcentaje que sigue en la actualidad. En los primeros años sacaron muchas plazas de permanente, logrando que adquiriesen esa condición muchos de los que se pasaban por edad o estaban a punto de hacerlo, pero cubrieron rápidamente ese 10% y los siguientes años apenas sacaron plazas para la permanencia. Por lo tanto cuando entró un nuevo gobierno en 2004, se encontró la patata caliente de tener miles de soldados cumpliendo o a punto de cumplir los 36 años y no siendo permanentes. ¿Qué hizo ese gobierno? La ley de 2006, o lo que es lo mismo, dar una patada al problema unos años. Ya que fija la expulsión por edad a los 45 años, aunque al menos no es con una mano delante y otra detrás, te dan 600 euros al mes hasta los 65 años si te haces reservista de especial disponibilidad. Lo cual no es una buena solución, 600 euros no dan para vivir con dignidad y a nadie se le escapa que a esa edad es muy difícil conseguir trabajo. Hay que decir que esos 600 son brutos, no incluyen cotización de ningún tipo ni nada, 7.200 euros al año.

En este punto hay que decir que la ley 8/2006 se cumple solo a medias. Se cumple maravillosamente en lo lesivo para nosotros, a los 45 años te echan si o si. Pero en lo que les obliga a ellos la cosa va más relajada. El artículo 20 del acceso a las administraciones públicas se incumple. El artículo 16 de formación y promoción profesional se incumple. El artículo 21 de medidas de incorporación laboral se incumple. Se tienen que desarrollar aun algunos aspectos de la ley dicen, se ve que en once años no han tenido tiempo.

No deja de ser curioso que todos los militares se rijan por la misma ley, la ley de la carrera militar y que el personal de tropa tengamos además una ley para nosotros solos, eso es en sí mismo una declaración de intenciones. Así mismo, no deja de ser curioso que cada nueva legislación que hacen a los militares afianza que haya estanqueidad entre las escalas, que no sean porosas. Antes era natural que de tropa se pasase a suboficial y así mismo era natural que los suboficiales llegaran al final de sus carreras a ser oficiales. Hoy el paso de tropa a suboficial está cada día más restringido y el paso de suboficial a oficial por antigüedad es inexistente.

A finales del año pasado la OATM presentó una batería de preguntas sobre los reservistas de especial disponibilidad que fueron contestadas, os enlazo: http://oatm.es/estadisticas-de-2017-de-los-reservistas-de-especial-disponibilidad/ al 30/09/2017 los reservistas de especial disponibilidad éramos 517. En once años de ley no parecen muchos, pero tenéis que tener en cuenta que las leyes de tropa son siempre una patada hacia delante y actualmente el balón se está parando. Este año de va a duplicar la cifra de reservistas y el año que viene se multiplicará al menos por cinco. Como veis se avecina una expulsión masiva por edad, pero la tropa está sufriendo un ERE encubierto desde hace años, las cifras son claras al respecto, solo hay que ver la evolución de las plantillas los últimos cinco años. Mientras que las de oficiales y suboficiales se han mantenido estables, la plantilla de tropa se ha reducido en 3.000 efectivos. Dentro de poco literalmente habrá más mandos que soldados.

Como os he contado, a la tropa se nos legisla a golpe de circunstancias, y eso tiene consecuencias, logra que nos movamos en la más absoluta arbitrariedad. Muchas veces el que seas permanente o no, depende del año que entraste al ejército, de la antigüedad que tengas en un momento determinado, de lo bien o mal que le caigas al jefe,… He visto sacar 300 plazas de permanente para una especialidad en la que en ese momento solo cumplían requisitos 290 personas, en el otro extremo he visto especialidades para las que no han sacado plazas en 10 años, he visto de todo y todo, regido por la más absoluta arbitrariedad. Esto es porque al mando en realidad le importamos poco, somos solo un número en sus estadísticas. Si lees el preámbulo de la ley de tropa lo ves claro: “Esta ley establece un nuevo sistema con la finalidad principal de consolidar la plena profesionalización. Para conseguir este objetivo se posibilita al soldado y marinero una prolongada relación temporal con las Fuerzas Armadas y, a su término, un abanico de salidas laborales y unas medidas socioeconómicas que tienen en cuenta los años de servicio realizados, con la pretensión de que prestar servicio en las Fuerzas Armadas se configure como una opción más atractiva para muchos de nuestros jóvenes.” Si analizas el texto que os he copiado, deduces que al hacer la ley no pensaron en las personas que formábamos parte del ejército en el momento de su redacción, pensaron en hacer un texto atractivo para encandilar a los chavales que en ese momento tenían opciones mucho más atractivas laboralmente hablando en otros lados. Tenemos que tener en cuenta que esa ley salió en 2006, época en la que las plazas que sacaban para tropa no se cubrían. Hoy la situación es muy diferente y por lo tanto no se ven en la necesidad ni si quiera de cumplir la ley.

Hoy no hay ningún abanico de salidas laborales al dejar el ejército, hoy no hay ningún interés por parte del mando en los reservistas de especial disponibilidad, ni ninguna medida de inserción laboral. Nada, en el año y medio que llevo siendo RED nadie se ha puesto en contacto conmigo. El SAPROMIL famoso se centra solo en los militares de carrera, para los militares temporales no sacan apenas nada y para los RED menos aun. Cuando aún estaba en activo, llamé al SAPROMIL para preguntar y un tipo con mucha soberbia me dijo algo parecido a esto: El SAPROMIL son siglas que representan palabras y esas palabras son; Sistema de aprovechamiento de las capacidades del personal militar. ¿Qué sucede cuando pasas a ser reservista de especial disponibilidad? Pues que pierdes la condición de militar a todos los efectos. Así que el SPROMIL no es para vosotros.

No soy el único, he leído infinidad de entrevistas a reservistas de especial disponibilidad (os enlazo alguna al final) y todas tienen un denominador común, el paro, estamos sin presente y sin futuro. La mayoría estamos parados, y cuando te ofrecen algún trabajo es con un sueldo más bajo que el del resto de empleados. ¿Por qué? Pues porque el empresario se apoya en los 600 euros que recibes por ser RED para ofrecerte menos dinero, dice que con los 600 euros y lo que te paga él cobras más que cualquier otro de sus empleados. Con lo cual, lo que te pagan por ser RED, acaba siendo una subvención al patrono. Eso mismo pasaría con el complemento salarial que propone C´s, acabaría bajando los sueldos, no cobrarías más, solo tendrías una parte de tú sueldo subsidiada, con lo que eso implicaría a nivel de cotizaciones.